Si
ustedes aman al que les ama ¿Cuál es el mérito? Hasta los publicanos actúan
así. Si ustedes quieren convivir tan sólo con aquellos que son de su agrado o
mentalidad ¿en qué está la novedad? Es una reacción instintiva. Miren a su
Padre ¿Creen ustedes que ese sol caliente y fecunda solamente los campos de los
justos? También los campos de los injustos y de los traidores. El Padre es así.
Los hombres le disparan blasfemias y El les envía un sol fecundante. Sean como
El.
Si
ustedes son cariñosos y saludan tan sólo a sus parientes y amigos ¿En qué se
diferencian de los demás? Hasta los ateos proceden así.
Miren esa
lluvia ¿Acaso el Padre hace discriminación, regando los campos de los buenos, y
dejando áridos los campos de los blasfemos e ingratos? Él no guarda rencor ni
toma venganza. Devuelve bien por mal y envía indistintamente la lluvia benéfica
sobre los unos y los otros. Sean como El, y se llamarán hijos benditos del Padre celestial.
-"sube conmigo", Ignacio Larrañaga
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