Vocabulario de "revelación Bíblica"

VOCABULARIO

1. La revelación

La revelación es la manifestación que Dios ha hecho a los hombres de Sí mismo y de aquellas otras verdades necesarias o convenientes para la salvación eterna.

¿Dónde se encuentra la Revelación?

La Revelación -también llamada Doctrina cristiana o Depósito de la fe- se encuentra en la Sagrada Escritura y en la Tradición.

¿A quién fue confiada la Revelación?

Jesucristo confió la Revelación a la Iglesia Católica. Por medio de sus Apóstoles, por tanto, sólo la Iglesia tiene autoridad para custodiarla, enseñarla e interpretarla sin error.

2. Hagiógrafo

La hagiografía (del griego: ἅγιος, «santo», y γραφή, «escritura») es la historia de las vidas de los santos. Al autor o practicante de la hagiografía se le denominahagiógrafo. Se denomina también como hagiógrafo a cualquier autor de los libros de la Sagrada Escritura, y, en la Biblia hebrea, a cada libro de la tercera parte.

3. Encíclica

En la antigua iglesia cristiana, una encíclica era una carta circular enviada a todas las iglesias de una zona. En ese momento, el término podía utilizarse para una carta enviada por cualquier obispo a sus fieles. La palabra proviene del latín "encyclia" y del griego "egkyklios" que significa "envolver en círculo", que es también el origen de la palabra "enciclopedia". La Iglesia Católica Romana en general, sólo utiliza este término para las encíclicas papales, pero la Iglesia Ortodoxa Oriental y de la Comunión Anglicana mantienen el uso antiguo.
Las encíclicas son cartas solemnes sobre asuntos de la Iglesia o determinados puntos de la doctrina católica dirigidas por el Papa a los obispos y fieles católicos de todo el mundo.
Tienen su origen en las epístolas del Nuevo Testamento y es el documento más importante que escribe el Pontífice.
Suele estar redactada en latín, el idioma oficial de la Santa Sede, y traducida a las principales lenguas del mundo y su título se toma de las primeras palabras del documento.
La primera de la historia de la Iglesia fue escrita por el papa Benedicto XIV en 1766.
Uno de los papas más prolíficos en encíclicas fue León XIII (1878-1903), que escribió 86. Pío X (1903-1914) redactó 16 y Benedicto XV (1914-1922) catorce.
Pío XI (1922-1939) escribió 30, Pío XII (1939-1958) 41 y Juan XXIII (1958-1963) ocho.
Pablo VI (1963-1978) redactó siete y a Juan Pablo I (1978-1978) no le dio tiempo a escribir, ya que falleció a los 33 días de ser elegido Papa.
En sus casi 27 años de pontificado Juan Pablo II (1978-2005) elaboró 14, comenzado con la "Redemptor hominis", del 4 de marzo de 1979, apenas cinco meses después de su elección como Pontífice, en la que trazó los principios de su ministerio papal.
La última encíclica fue "Ecclesia de Eucaristia", publicada en abril de 2003, en la que trató sobre la Eucaristía.

4. Concilios

Concilio (del latín concilĭum)¹ es una reunión o asamblea de autoridades religiosas (obispos y otros eclesiásticos) generalmente efectuada por la Iglesia Católica Apostólica Romana y/o por la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa, para deliberar o decidir sobre las materias doctrinales y de disciplina.

Se distinguen tres clases de concilios:

·         Los concilios ecuménicos, generales o universales. Hasta 1054, fecha en que se produjo el Cisma de Oriente y Occidente, se contabilizaron ocho concilios de este tipo. Convocados por el emperador, salvo el octavo que fue convocado conjuntamente por el emperador bizantino y el papa; participaban los obispos, abades y patriarcas de toda la cristiandad (concilios griegos).

Desde 1054 este tipo de concilios sólo se celebraron en Occidente, por la comunión Católica Apostólica Romana, y sumaron otros doce concilios, siendo convocados en todos los casos por el papa y participando todo el episcopado católico romano (concilios latinos). Otros concilios celebrados alternativamente por la Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa no se incluirán en esta línea.

El último concilio ecuménico fue el Vaticano II ya que su sede fue la Ciudad del Vaticano. La convocatoria la realizó Juan XXIII en 1959, iniciado por este mismo en 1962^{[cita requerida]} y fue clausurado por Pablo VI en el año 1965.

·         Los concilios nacionales o plenarios. Son convocados con autorización papal y en ellos sólo participa el episcopado de un continente, estado o región.

Entre ellos están los concilios (nacionales) de Toledo, que fueron juntas de prelados y magnates durante la dominación visigoda, que se celebraron en dicha ciudad para tratar asuntos eclesiásticos y militares.

·         Los concilios provinciales. Son convocados por el obispo metropolitano de la diócesis provincial correspondiente, se celebran periódicamente cada veinte años, y en ellos participan los titulares de oficios eclesiásticos de la diócesis.

LA REVELACIÓN BÍBLICA

Les envío los escritos que hemos estado viendo en clase. Esta es la que vimos la sesión antepasada. Recuerden los siguientes puntos:

A) Lean detenidamente y repasen de la mano de su vocabulario debidamente enumerados. 

B) Recuerden que las palabras marcadas en asterisco (*) son las que pueden consultar en el vocabulario, esto para una mejor comprensión del tema y dado que desconocemos muchos aspectos o términos de la Biblia y de la misma Iglesia que son importantes.

C) La palabras que están en negrita son como para ponerles mayor atención, es decir ¿las entienden? si no, investigarlas

D) Es importante leer y tener a la mano por lo menos tres instrumentos a la mano. Estos son: La Biblia (para checar y leer los textos); la línea de tiempo (para ubicar los escritos); y un mapa de la tierra prometida (Canaán), ahí por el mar mediterráneo (para ubicar los lugares que se mencionan sobre todo en los escritos que vimos la sesión pasada donde vienen más elementos.

1.     Las sagradas escrituras inestimable don de Dios

Son un inestimable don de Dios que el hombre no podrá nunca suficientemente agradecerle. Quiso Dios, por su inefable misericordia redimir al hombre de su caída del pecado. Estos sus amorosos designios sobre él ha ido descubriéndoselos al hombre gradualmente, revelándoselos, dándole así a conocer los inefables misterios de la vida divina, de su amorosa providencia, especialmente en cuanto a la redención.

2.     Principal contenido de las Sagradas Escrituras. La revelación*

Esta revelación, hecha de una manera gradual y progresiva, es el principal contenido de las Sagradas Escrituras que reveló Dios al hombre para que con mayor facilidad y certeza pudiera conocerlas sin error, todas ellas se subordinan al fin principal de las Sagradas Escrituras; dar a conocer al hombre los inescrutables amorosos designios de Dios sobre él.

3.     No son las Sagradas Escrituras la única fuente de revelación

Se contiene, además, en la tradición viviente de la Iglesia de Cristo, que es la fiel depositaria del divino tesoro y el intérprete autorizado de los sagrados libros.

         Sólo la Iglesia puede indicarnos con infalible certeza cuáles son los libros que, escritos bajo la inspiración del Espíritu Santo, contienen y sólo podrá servir para confirmar la verdad de la doctrina de la Iglesia.

         También en nuestra vida y la creacion encontramos la revelación de Dios.

4.     Las Sagradas Escrituras son obra de Dios y del hombre

La Biblia tiene como autor principal a Dios aunque sean también al mismo tiempo obra humana. Son dos autores principales: Dios como inspirador y el hombre como redactor. Este doble carácter de los libros santos, totalmente obra del hombre, es fundamental y capitalísimo para el conocimiento e interpretación de la Biblia y de no tenerlo en cuenta tropezará el lector de estos libros con nnumerables e insolubles dificultades.

El autor humano es órgano, instrumento del Espíritu Santo, pero instrumento vivo y racional, que bajo la acción de Dios desarrolla su actividad y usa de tal manera que en el libro por él escrito queda como grabada su personalidad (modo de ser), que fácilmente podrá de él deducir el lector.

5.     La profecía

No ha querido Dios revelarse inmediatamente a todos y a cada uno de los hombres sino a algunos solamente, que, como intermediario entre Dios y el resto de los humanos, reciban de Él las divinas enseñanzas y en su nombre y con su divina autoridad las transmitan a los demás.

6.     Los profetas

Estos intermediarios han sido llamados profetas o intérpretes de Dios que transmiten verdades sobrenaturales que sobrenaturalmente les dio Dios a conocer.

7.     El conocimiento profético de los Hagiógrafos*

Es el último grado de profecía, es el más común a los autores sagrados. La fe, como la teología, contempla todas las cosas bajo una razón formal divina y sobrenatural. De un modo semejante los hagiógrafos conocen las cosas y juzgan de ellas a la luz de los altos principios divinos. Esos principios están basados en conocimientos sobrenatural de los atributos divinos: del poder, de la justicia, de la misericordia, de la bondad, de la veracidad de Dios. Tenemos a Josué al describirnos el cumplimiento de las divinas promesas en la distribuciòn de la tierra prometida. O cuando el salvador (Jesùs) exponía en camino a Emaús, a sus dos discípulos mostrándoles por los profetas, a partir de Moisés, cómo era preciso que Cristo muriera y por la muerte entrara en su gloria.

La sagrada Escritura es veraz con verdad divina

Todos los libros que la Iglesia recibe y propone como canónicos y sagrados han sido en todas sus partes escritos bajo la inspiración del Espíritu Santo, tan lejos de admitir error alguno en cuanto que es imposible que Dios, suma verdad, esté sujeto al error. Tal es la antigua fe de la Iglesia, definida solemnemente por los Concilios* de Florencia y Trento, confirmada por fin, y màs solemenmente expuesta por el Concilio Vaticano (Encíclica* Providentissimus Deus).

Preguntas Clave:

1. ¿Qué es revelación?
2. ¿Quién es un Profeta?
3. ¿Qué es una Encíclica?
4. Cuando tengas oportunidad busca en internet la encíclica Providentissimus Deus
5. ¿Qué es un Hagiógrafo?

Mándalas con tu nombre a alex18225gm@gmail.com

NOTA: El vocabulario correspondiente a este escrito se encuentra enseguida, arriba de éste.